17 de enero, 2025

Puede ser que te encuentres o no muy a gusto con tu trabajo. Pero en ocasiones suelen surgir nuevas oportunidades laborales que te invitan a perseguir nuevos objetivos en tu carrera. Por ello saber hacer una carta de renuncia voluntaria es importante para un colaborador.

Sea cual sea el caso, saber cuándo renunciar, cómo hacerlo y cómo escribir una adecuada carta de renuncia es importante.

No solo para tramitar adecuadamente tu salida, sino también para dejar una buena última impresión que te pueda dejar las puertas abiertas por si en algún futuro, decides regresar.

Proceso de renuncia en México

La Ley Federal del Trabajo (LFT) en México establece que la relación laboral es un vínculo jurídico entre el trabajador y el patrón donde el primero se subordina al segundo prestando un servicio personal a cambio del pago de un salario.

El trabajador puede tomar la decisión de no continuar prestando sus servicios para el patrón en cualquier momento y por diversas causas.

Algunas de las causas contempladas por la ley son motivos de carácter personal, por recibir otra oferta laboral acorde a sus necesidades económicos o intereses, y por no sentirse cómodo en su empleo.

El trabajador puede presentar la renuncia en forma oral o escrita. Depende de las circunstancias específicas del caso concreto que se produzcan efectos jurídicos.

Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determina que la renuncia debe acreditarse de manera fehaciente y que no haya dudas que el trabajador manifestó su voluntad de poner fin a la relación laboral.Por ello, se recomienda que siempre que se quiera renunciar, se haga de manera escrita a través de una carta de renuncia. Y así, realizar un proceso de offboarding efectivo.

Pasos para escribir una carta de renuncia voluntaria

Para escribir una carta de renuncia de manera clara y profesional, sigue estos pasos:

Encabezado con datos básicos. Incluye la fecha, tu nombre, tu cargo y los datos del destinatario (nombre, puesto y empresa).
Saludo formal. Dirígete a tu jefe directo o al área de Recursos Humanos con un saludo respetuoso, como “Estimado/a [Nombre]”.
Declaración de renuncia. Expresa de forma directa tu decisión de renunciar al puesto, especificando la fecha en la que surtirá efecto. Se recomienda dar al menos 15 días de aviso, según las políticas de la empresa.
Motivo de la renuncia (opcional). No es obligatorio, pero puedes mencionar de forma breve y profesional la razón de tu salida, sin detalles negativos.
Agradecimiento. Expresa gratitud por las oportunidades, el aprendizaje o la experiencia adquirida en la empresa.
Disposición para el proceso de transición. Ofrece tu apoyo para facilitar la entrega de actividades o el proceso de sustitución del puesto.
Despedida y firma. Finaliza con una despedida cordial, como “Atentamente” o “Cordialmente”, y firma con tu nombre.

Siguiendo estos pasos, tu carta de renuncia será profesional y respetuosa, dejando una buena impresión en la empresa.

Recomendaciones adicionales para tu carta de renuncia

La presentación y el contenido de la carta de renuncia hablan mucho de quien los presenta y de su compromiso para entenderse con sus jefes y sus compañeros de trabajo. Por ello, es necesario que cuides tres aspectos más cuando vayas a presentar tu renuncia:

Mantén un tono formal y positivo: Evita comentarios negativos sobre la empresa, compañeros o jefes, incluso si tu experiencia no fue la mejor.
Sé breve y claro: No es necesario detallar razones personales o extender demasiado la carta. Con un mensaje directo y cortés es suficiente.
Respeta el tiempo de preaviso: Verifica el contrato o las políticas de la empresa para asegurarte de dar el tiempo de aviso adecuado (generalmente 15 días o un mes).
Entrega la carta en el momento adecuado: Habla con tu jefe antes de enviarla para que la noticia no sea inesperada y cause problemas en la operación.
Solicita un acuse de recibo: Es recomendable que Recursos Humanos firme una copia o envíes la carta por correo electrónico para dejar constancia formal de tu renuncia.
Ofrece ayuda en la transición: Disponer de tiempo para capacitar a quien tomará tu lugar deja una buena impresión y puede ayudarte a mantener una buena relación profesional a futuro.

Recuerda en todo momento mantener un tono positivo constante. La redacción de tu carta de renuncia hablará de tu integridad profesional y personal.

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