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Comportamiento organizacional: ¿en qué consiste?
El comportamiento organizacional ayuda a las empresas también a entender cómo interactúan los distintos departamentos y ser más eficientes.
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Beto Villareal
HR Consultant
28 de febrero, 2023
¿Alguna vez te has preguntado por qué en algunas organizaciones parece más fácil hacer las cosas y en otras no? ¿O por qué un cambio de política aparentemente sencillo puede tener un impacto tan drástico en la productividad de una organización? La respuesta puede estar en el comportamiento organizacional.
¿Qué es el comportamiento organizacional?
El comportamiento organizacional es el estudio de cómo interactúan las personas dentro de una empresa y cómo su comportamiento afecta al bienestar de la organización en su conjunto.
Es un campo interdisciplinar que se centra en la comprensión y gestión de las dinámicas individuales, grupales y organizativas. En otras palabras, ayuda a descubrir por qué los empleados se comportan como lo hacen. Cómo las empresas pueden utilizar este conocimiento para mejorar:
- La productividad.
- El compromiso.
- La moral.
- La cohesión del equipo.
Implica analizar el comportamiento en tres áreas clave:
- Comportamiento individual (actitudes, valores, creencias y decisiones individuales),
- Comportamiento de grupo (cómo interactúan los individuos dentro de los equipos) y
- Estructura organizativa (cómo se dividen las tareas entre funciones o departamentos).
Aprovechando estas tres áreas de interés, las organizaciones pueden identificar patrones y problemas que pueden estar afectando a las operaciones, o incluso oportunidades potenciales de mejora.
Este conocimiento puede utilizarse para diseñar políticas eficaces, como horarios de trabajo flexibles, que creen un entorno en el que los empleados se sientan respaldados en su trabajo.
Como resultado, las organizaciones pueden tomar decisiones informadas sobre la dinámica del lugar de trabajo que, en última instancia, mejorarán la moral y el rendimiento general.
Ventajas de entender el comportamiento organizacional
El comportamiento organizacional puede ser una poderosa herramienta para ayudar a su empresa a alcanzar sus objetivos. Al comprender mejor los comportamientos y actitudes de sus empleados y el entorno que los rodea, puede mejorar el rendimiento de los empleados, mejorar la moral y crear un lugar de trabajo más productivo.
He aquí algunos de los principales beneficios que puede aportar la comprensión del comportamiento organizativo:
- Mejora de la comunicación: saber cómo comunicarse eficazmente con las personas en diferentes roles y posiciones ayudará a construir la confianza y fomentar la colaboración.
- Aumento de la moral: comprender el comportamiento organizativo ayuda a crear una atmósfera de respeto, confianza y reconocimiento que contribuye a elevar la moral.
- Reducción de la rotación: un buen comportamiento organizacional ayuda a crear un ambiente donde los empleados se sienten valorados, lo que puede conducir a una mayor satisfacción en el trabajo y menos renuncias de empleados.
- Aumento de la productividad: al comprender lo que motiva a los empleados, puede atender sus necesidades y fomentar un entorno de trabajo que promueva la creatividad y la concentración, lo que conduce a una mayor productividad.
¿Cómo determina el comportamiento organizacional la cultura de una empresa?
Comprender el comportamiento organizacional puede ayudar a su empresa a conformar y mejorar su cultura. El comportamiento organizativo es el estudio de cómo piensan, sienten y actúan las personas a diario en el lugar de trabajo. Permite profundizar en los comportamientos de los empleados y en cómo interactúan entre sí y con su entorno.
Este valúa cómo funciona la empresa en su conjunto, así como la dinámica individual de los empleados. Al comprender las percepciones, actitudes, motivaciones y patrones de comportamiento personales de cada persona, puede entender mejor sus personalidades y cómo contribuyen a su cultura organizativa.
También, ayuda a descubrir posibles problemas o áreas de mejora en el lugar de trabajo. Esto puede incluir cualquier cosa, desde la moral de los empleados hasta las dinámicas de grupo o los estilos de comunicación.
Le ayuda a identificar lo que funciona bien y los cambios necesarios para crear un entorno de trabajo óptimo que fomente la colaboración y la productividad.
Componentes clave del comportamiento organizacional
Estos son los cuatro componentes principales del comportamiento organizacional:
1. Actitudes
Las actitudes se refieren al modo en que los sentimientos de una persona hacia algo influyen en su comportamiento. Las actitudes positivas pueden resultar en empleados más felices y motivados, mientras que las actitudes negativas pueden conducir a una falta de motivación y a una disminución de la productividad.
2. Dinámica de grupo
La dinámica de grupo se refiere a los efectos que las interacciones entre los miembros de un equipo tienen sobre su rendimiento. Es importante que los directivos sean conscientes de cómo interactúa su equipo entre sí, ya que esto puede tener un gran impacto en su capacidad para trabajar juntos hacia objetivos comunes.
3. Motivación
La motivación es lo que impulsa a una persona a actuar y alcanzar sus objetivos. Los distintos tipos de motivación pueden provenir tanto de fuentes internas como externas, como los incentivos o el reconocimiento de jefes o compañeros. Saber qué motiva a sus empleados puede ayudarle a animarles a dar lo mejor de sí mismos y a aumentar la productividad.
4. Gestión del estrés
La gestión del estrés es fundamental para una cultura organizativa eficaz, ya que ayuda a los empleados a hacer frente a situaciones difíciles y a seguir siendo productivos a pesar de los retos que puedan encontrar en el trabajo.
La aplicación de técnicas eficaces de gestión del estrés, como el mindfulness o el yoga, puede ayudar a que sus empleados se sientan tranquilos, serenos y centrados en sus tareas laborales sin sentirse abrumados o agotados con demasiada rapidez.
¿Cómo afecta el comportamiento organizacional a la toma de decisiones?
El comportamiento organizacional puede ayudar a su empresa a tomar mejores decisiones de varias maneras. En primer lugar, puede ayudarle a identificar áreas en las que existe potencial de mejora. Estudiando los comportamientos y actitudes de los empleados, puede saber qué cambios hay que hacer para mejorar la eficiencia y eficacia generales de la organización.
En segundo lugar, puede ayudar a los directivos a tomar mejores decisiones al darles acceso a datos sobre las actitudes y comportamientos de los empleados de su organización. Estos datos pueden ayudar a los directivos a comprender mejor cómo interactúan los empleados entre sí y con su entorno, lo que a su vez les ayuda a tomar decisiones más informadas sobre cómo gestionar mejor su organización.
En tercer lugar, el comportamiento organizativo proporciona a las organizaciones un marco para tomar decisiones que tengan en cuenta los beneficios tanto a corto como a largo plazo. Esto permite a las empresas tomar decisiones que tendrán efectos positivos duraderos en su organización a lo largo del tiempo.
Por último, el comportamiento organizativo proporciona a los directivos las herramientas que necesitan para identificar y aplicar cambios que afectarán positivamente al rendimiento de su organización tanto a corto como a largo plazo. Estudiando el comportamiento organizativo, los directivos pueden aprender a ajustar sus estrategias para alcanzar mejor los objetivos importantes para el éxito de su empresa.
¿Cómo puedo fomentar una cultura de buen comportamiento organizacional en mi empresa?
Fomentar una cultura de buen comportamiento organizacional en su empresa no es una tarea imposible, si se empieza por saber lo que es. El estudio del comportamiento organizativo examina cómo interactúan las personas en su entorno y cómo repercuten estas interacciones en la organización en su conjunto.
Para crear una cultura de buen comportamiento organizativo en su empresa, debe comprender lo siguiente:
Establecer objetivos y valores claros
Establecer el tono de una cultura positiva empieza por fijar objetivos y valores claros para todos los miembros de la organización. Esto debería incluir objetivos a corto y largo plazo para que todos tengan algo por lo que trabajar.
Además, asegúrate de que todo el mundo conoce los valores que defiende tu organización, ya que esto ayudará a orientar las decisiones y acciones de los empleados.
Fomentar la colaboración y la comunicación
Un buen comportamiento organizativo no sólo tiene que ver con el rendimiento individual, sino también con la forma en que las personas colaboran en el lugar de trabajo. Fomenta la comunicación interna abierta entre equipos y departamentos para que puedan trabajar juntos hacia objetivos comunes.
También puedes poner en marcha sistemas que permitan a los empleados aprender unos de otros al tiempo que desarrollan vínculos que fomenten la confianza y el respeto dentro de la organización.
Crear un entorno atractivo
Crear un entorno atractivo es clave para fomentar un comportamiento organizativo positivo en su equipo u organización. Asegúrate de que los empleados se sientan valorados a través de reconocimientos periódicos, recompensas u otras formas de refuerzo positivo, todo lo cual contribuirá a motivarles para que obtengan grandes resultados y a aumentar sus niveles generales de satisfacción en el trabajo.
Si entiendes qué es el comportamiento organizacional y tomas medidas para fomentar una cultura de buen comportamiento organizativo en su empresa, podrá crear un entorno en el que todos prosperen, garantizando el éxito a largo plazo de su negocio.
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Profesional de 𝐇𝐑 con experiencia dedicado a fomentar 𝐜𝐨𝐦𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐜𝐨𝐥𝐚𝐛𝐨𝐫𝐚𝐭𝐢𝐯𝐚𝐬 fuertes entre líderes de RRHH. Como fundador del 𝐇𝐑 𝐂𝐥𝐮𝐛 y la 𝐇𝐑 𝐂𝐨𝐦𝐦𝐮𝐧𝐢𝐭𝐲, utilizo mis más de 15 años de experiencia para mejorar el panorama profesional de los líderes de RRHH.
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